goddess

"tú y tu extraña fascinación por esa mujer" me dijo el ocho. yo reí y sólo atiné a decir "claro, como siempre". apenas regresaba de haberla visto y mi corazón aún latía fuerte, todavía me encontraba disfrutando de la emoción de escucharla, de sentirla. aún no me reponía del orgásmico momento de escuchar el "oh fortuna" mientras miraba sus ojos ardiendo. y es que a pesar de haber dicho infinidad de veces que no es para mí, a pesar de saberlo y confirmarlo a cada momento, ella sigue perturbando mi corazón y mi mente. siempre ella, presente. siempre sus ojos azules clavados en mi memoria. siempre su cuerpo de nube envolviendo mi atmósfera. siempre ella.

dormí plácidamente sin soñarla, lejos de todo indicio de su presencia unas horas atrás. pero el sueño sólo sirvió para reponer las energías de mi cabeza y mi corazón, para darle más capacidad a mi memoria y traerla de vuelta al despertar. renovando su imagen, su voz, la mirada cristalina de su fuerza. haciendo renacer esta ansiedad que fluye como torrente sanguíneo, recorriendo la infinita distancia entre sus brazos y mis deseos.

y heme aquí sin poder concentrar mi energía en cosas más útiles. ahora ha tomado mi cabeza y se ha apoderado de todo cuanto en ella se encuentra. ahora como ayer en francia, juana, milla, ha tomado las armas de su belleza y su intelecto y ha avanzado con su ejército de miradas, susurros, gritos y pasiones, conquistando la torre de mi ansiedad, la nación de mi conciencia y tomándome como rehen en la sangrienta lucha por avanzar en su imperio.

no me resisto más. ¡que arda mi cuerpo en la hoguera también si es preciso, que jamás negaré su nombre ni de mis labios borraré el recuerdo de su beso jamás sentido!