hay días en que atardeces
y respiro sobresaltos
alargándome en la espera
deshilando los segundos
amarrando cordeles al tiempo inquebrantable
madrugadas de piel fría
solitaria
lejano desvarío el de mi fiebre
lejana curvatura de tu espalda
dudas escurren por tus ojos
aleteos de ansiedades
y pregunto por tu ausencia
y me ausento en tus palabras
todo eres
ardor rebosante de inocencia pura
amarilla estela de un andar furioso
caracola nueva
acúnate en mis pupilas
que no veo sin tu transparencia
acomoda tu desvelo en mi caricia
desvanece la cordura en mi impaciencia
desvela el sueño inconcluso en la mañana
abrígate entre mis venas
anhélame
déjame saberte tibia
y romper el miedo que me priva
de llenar con tu aire mi inconciencia
de tocar tus labios con mi brisa
1 comentario:
Yo quiero eso.
Saludotes Joelia, ya de nuevo x estos lares.
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